El árbol seco el camino (II)
II
oceánica
La
madrugada eleva
el verso a la altura
de tus labios
desnuda
Ir a ti es
huirme?
¡Oh
madrugada! o ir a ti es sentarme conmigo
extenderme
en la nada
habitarme al
respirarte
tu desnudez
extendida pletórica
erótica elevada
como horizonte
ondulante y
húmeda nostalgia
refugio de
los futuros
la belleza se
curva en su plenitud de cadera
aire carnal
de la vida
te poseo en
el verso
quintín alonso méndez
Ir a ti es encontrarme...
ResponderEliminarPoseerte en la palabra hecha carne