jueves, 27 de abril de 2017


La piel del verso

Se yergue el sol como altiva y presuntuosa fruta verde
sabedor de dirigirse a la llamarada del incendio
oceánica boca devoradora que llama
al profundo abismo azul de la abierta fruta del Universo
polen de aire de minerales se sumerge
como fuente salpican semillas de agua




quintín alonso méndez

lunes, 24 de abril de 2017


La piel del verso

Pasó el tiempo
lo vi pasar con sus paraguas mentolados
por las frondas de los árboles
con sus palos secos como bastones
marcando las rutas equivocadas de los senderos
vi al tiempo resbalando por los toboganes de los veranos
lo vi calzarse las botas de invierno
envolverse en el viento
alguna vez quiso ser mañana para llegar al encuentro
era pasado cuando se sentaba en una roca
lo vi sangre del aire lluvia del aguacero
lo vi brisa y lo vi columpiarse en los atardeceres
lo vi vestido en sus harapos con pañuelos de seda al cuello
lo vi desnudo a lo lejos nocturno y mañanero
pasó el tiempo
mis silencios creyeron verlo
fue fruto
hijo de su propio tiempo
y fue destierro
alguna vez lo vi ebrio en sus desvaríos
mustio en sus grises invernales
en las plazas
en medio de la vejez y las infancias
casi siempre a solas
caminando
nunca quiso quedarse
quintín alonso méndez









martes, 18 de abril de 2017


La piel del verso

El hombre camina por caminos que el mundo desconoce
porque el mundo yace subterráneo
latido húmedo de rumor silencioso
el hombre camina por encima de las piedras
nunca más abajo de su suelo de límites y fronteras
látigos para la tierra abriéndola
las raíces que como ríos sedientos se extienden
y entrelazadas sostienen
la delicada tela de minerales por la que caminamos
orilla del agua y la luz
vientre de la nocturnidad
desenlace del día
el eco del espejo hace cumplir la ley del tiempo
cuando caminabas conmigo tus manos eran racimos de uvas
en tus labios hablaba la voz de la vida
tu cuerpo era el íntimo sol de la penumbra
allí habitamos
en el istmo que ahora separa

quintín alonso méndez


jueves, 13 de abril de 2017


La piel del verso

Miro las mariposas blancas en el día azul
este dios es imbécil
me dice que son hilos de agua evaporada
que forman las nubes
las mariposas blancas no saben tu nombre
pero lo escriben deslizándose por el aéreo azul
este dios es un traidor: no existe
más traidor si existiera
maripositas blancas
sacadas del papel donde te escribía
te quiero
cuando las tijeras de madre bordeaban las orillas
con el amor de lo que se ignora
pero se palpa
ah! mariposas blancas
este dios es cruel se siente culpable
mató al hijo para disculparse
maripositas blancas burlando el fuego del sol
alas del salitre
de este mar que te hizo el amor
¿quién lleva la verdad a cuestas
el mendigo o el príncipe azul?
porque la verdad sí existe
maripositas blancas recortadas del blanco papel
donde escribí te quiero
vuelan en el soleado cielo azul
es la brisa de los encantamientos
la materia de lo que no está 

quintín alonso méndez


lunes, 10 de abril de 2017


La piel del verso

estar contigo es cárcel
dulce cárcel pero cárcel
vuelo libre y placentero
hasta los límites mismos
del pulso del hálito
en las cenizas de lo agónico
dulce en el amargo dolor
pero dolor de cárcel
sabor de cárcel
el dulzor amargo de lo no asido
la inaudita libertad por inconcebible
de tan pobre imaginada
la mezcolanza de todos los sabores soñados
elevada a la magia de lo impensable
lo sublime que ata para la eternidad
toda tú
mi cárcel libertaria
estés lejos estés cerca
dentro fuera
en todas las partes de la ausencia
en todas sus dimensiones
en todas tus presencias que me parpadean
como dulces espadas de fuego que atraviesan
cárcel
liberadora cárcel
mi rica voluntad pobre
todo yo
espíritu de horizontes
cuerpo de cárcel
de humilde
despoblada
dulce amarga
voladora
cárcel
pero cárcel

quintín alonso méndez



jueves, 6 de abril de 2017


La piel del verso


ascienden los pensamientos como procesión perezosa de hormigas
por el tallo azucarado de esta tarde con limones al sol
es de carne rociada de malvas la azulada curvatura lánguida 
del aire que se tiende en la hamaca de un horario
un rumor de mar en la naviera brisa recuerda a los naufragios
que satisface a estos mis ojos que se pierden en los estambres de los olvidos
invisibles olvidos que resbalan por el arco del tiempo irrepetible
continuo tiempo que regresa al origen del círculo péndulo del vacío
ascienden los pensamientos por las venosas cuerdas verdes de los árboles
una mirada camina a solas por las orillas de los párpados ciegos
retengo en las manos los suspiros de barandas rozando la piel
las pausas que tus labios carnosos como violetas le ponían a la tarde

ahora miro sobre la noche cómo la luna se esconde
en las ramas negras del acantilado

quintín alonso méndez

lunes, 3 de abril de 2017


La piel del verso

Cuando la luz es azul deslizándose por los violetas
es un día sin regresos / liberados los pájaros del sol
las laderas ensalitradas del aire como caderas de tus caderas
deshojándose la luz en penumbras como los jadeos en los labios
carnales las huellas de los recuerdos
un regreso sin lugar en el tiempo implacable
que no se vaya la lujuria del astro luminoso
que no se vaya y que espere / la noche que espere
hay toda una eternidad nocturna
a la vuelta de la esquina solitaria
que espere la oscura certeza anclada en el mar
que la lujuria del instante evocado
siga deslizándose por los violetas
por tus desnudas caderas
cuando la luz es azul y mientras yo me desangro
vertiéndome

quintín alonso méndez