Viaje interminable (67)
jorge garcía
Imaginario
con atraso de siglos
de milenios
poema a la amante que me amó o al menos
estuvo conmigo mientras duró un sol dibujitos en el papel
-rara y cara cosa cuando no hay dinero y como siempre solo
existen los enemigos
se cobra con el despido de los huesos y la carne-
¡ah! ¡no es poema de alfombras ni testigos!
poema a sus dedos de blanca yerba
a la sonrisa aquella perdonándome la vida al constante caerme
a las palabras que encubrían lo que no hay que decir
poema a sus miradas que me despeñaron por alturas sublimes
insignificante que luego antes después mientras fueran ajenas
propias de otros lugares de otros amantes
insignificante el poema
claro que en la niebla claramente insignificante
pero ¡ah tan insignificante es un sentimiento
tan escasas las perras de vino con la poesía!
-ya no duele lo que mató ya tampoco hiere la muerte
ni siquiera hiere lo que hiere así se vierte lo que cubre las
ruinas-
yo estuve allí donde se está en la muerte
y también estuve donde se está en la vida -yo no era pero
estuve-
poema a ti gata de las azoteas arañando cada teja del viejo
tejado
-eran como violines con las cuerdas de viejas rasgadas-
y yo por abajo por las calles sin farolas sin lumbre de luna
como niebla con ese caminar con esa flojera
con ese irme a ninguna parte que tú tan bien conocías
jorge garcía
