Un silencio
Después del sabor amargo en la boca
viene la angustia. Detrás de ese sabor, detrás de una débil puerta, está el
miedo. Que nunca se ha ido. Nada más espera agazapado a la espera de noticias
de catástrofes. Entonces, la puerta se deshará ante el quejido del aire. Hoy se
ha acercado una de ellas hasta mi ventana. Un papel en blanco. Entro en los
recovecos del horizonte, más lejano que ayer, y no encuentro más que impasibles
silencios. Dejo que la mirada se vaya a cazar sonrisas en el bosque de la nada.
Todo lo que no soy, está en el árbol: raíz, rama, vuelo. Desde lo más alto, un
viejo nido abandonado se resiste a caerse, incrustado entre las hojas ya secas
del tiempo. Palpita un sueño en alguna parte, adonde nunca podré llegar. Después
del miedo, viene la certeza del abismo. Hoy se ha acercado hasta la ventana una
noticia de catástrofes, trayendo en su pico una carta. Una hoja en blanco
Quintín Alonso Méndez
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